viernes, 17 de mayo de 2013


SOBRE LA LEY:

29 de Junio del 2006. Don Art.
La Ley, cuchillo que hiere solo a los desamparados.
La Ley, acomodaticia costura para parchar las almas.
La Ley, plato sobre el que comen los micos con fuero.
La Ley, escalera con la que cortan los mejores frutos los inmorales, los impúdicos y los tranzas.
La Ley, anillo en la nariz de los idiotas.
La Ley, preámbulo de duras notas de una canción desesperada.
La Ley, ayuda a quien la compra y hunde a quien no la sabe buscar.
La Ley, soga que aprieta y ahoga la voz de los desposeídos.
La Ley, tabla raza para quien atropella a la “Razón” de los que mandan.
La Ley, regla de dos medidas, la larga para los que la hacen, y la corta para los que la sufren.
La Ley, puta de precio variable parada en la esquina de la Avenida Oportunidad.
La Ley, capa ligera con la que se cubren los que la violan y se cobijan los que la utilizan y compran
La Ley, pájaro cantor parado en el vértice de la constitución y los reglamentos.
La Ley, calidoscopio de variadas lumbreras que se deja mover al criterio de los que la defienden.
La Ley, balde asentado a la orilla del brocal del pozo de la verdad, manejado hay veces por inconscientes y malvados.
La Ley, compartimiento oscuro que presume de ideal luminiscencia.
La Ley, interminable juego de las serpientes y escaleras.

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